Periodismo Frontal sin censura hasta las últimas consecuencias

lunes, 10 de noviembre de 2025

EDUARDO VERASTEGUI NO ES KAIRO PARA OPINAR

 

















Ahora que el público se encuentra rodeado  por una parte entre   reporteros  ignorantes  de una generación que creció y se educó a base del direccionismo y la distorsión de ideas  y por el otro lado de  comunicadores mal intencionados    y portadores de la manipulación mediática, es que  Eduardo Verástegui con aspiraciones a ser Presidente de México, evade a toda costa su opinión sobre el nivel de los medios de comunicación de manera general, ya que  ha sido beneficiado por los  medios mal intencionados  que  apoyan sus teorías retrogradistas y anti Estado, y de manera indirecta también de los reporteros   sumidos en el aspiracionismo y la ignorancia profunda ante una formación cien por ciento  televisiva y bajo la útopica carrera de periodismo o ciencias de la comunicación  que las escuelas  autorizadas regalan títulos  con sólo pagar una colegiatura. Primero  el control sobre la población mexicana  fue por medio de la religión en la etapa  de colonización, después por la repartición de la riqueza y luego por alimentar las conductas clasistas y racistas. El tamaulipeco ultraderechista, conservador y desproporcionalista  religioso, comenzó  filtrándose  en la opinión pública por medio de  la esfera del espectáculo al tener participaciones en la industria musical al formar parte del grupo Kairo y después  en el mundo de la actuación en diferentes producciones telenoveleras de Televisa. posteriormente formó una asociación  como parte del movimiento "Viva México" para aspirar a la presidencia del país y cumplir objetivos de soporte de poder  del empresariado delincuencial que a base de ilegalidades y maniobras legislativas se fueron apoderando del patrimonio nacional de México  con la intención de arrodillar su orden  social, jurídico y comercial en manos de extranjeros.  Su  participación en el cine es una maniobra  estratégica para seguir influyendo en  las opiniones descontroladas y sin  argumentos de sustento del débil mental e ignorante que las emite por repetición mediática. Aparentando ser un hombre de fe y religioso es impulsor de cualquier tipo de retrogradismo y limitación de libertades, y ante un amplio historial de declaraciones  fuera del sentido común y apegadas al fanatismo extremo, le resulta difícil mostrarse en libertad en sus declaraciones, ya que es complicado opinar en libertad ante tantos intereses creados y ante la limitación de pronunciamientos que puedan contradecirse con sus verdaderos actos.