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martes, 24 de septiembre de 2024

FIGURAS SINTETICAS ANTE UN ROCK DE PELIGRO PARA MEXICO

 






























La música ha tenido una fuerza cultural y política igual a la de la literatura, a la de otras artes y a la propia denuncia periodística, nada más que su penetración es mayor, porque pasa de una coincidencia ideológica a ser un modo de vida que rompe los esquemas establecidos y que resultan funcionales para un régimen y provoca al accionismo. La penetración del rock en todo el mundo fue señalada como la culpable de los levantamientos sociales juveniles, principalmente en los años sesentas, en donde los estudiantes bajo la influencia de la lucha y reconstrucción  socialista en Cuba, ya no se conformaban con la canción boba  de la rockola y la malteada que en México les presentaban los juniors comprometidos con los sexenios de López Mateos y  del genocida  estudiantil Gustavo Díaz Ordaz,  mediante  las películas cuyas estrellas principales era  el venezolano Enrique Guzmán y la estadounidense Angélica María. Aunque  se culpa a las películas  proyectadas  en el Cine Roble de Paseo de la Reforma, en la Ciudad de México de sembrar las primeras semillas de rebeldía, lo cierto es que lo único que se fortaleció fue al rock and roll,  en donde se definía el modo de vida juvenil, con una rutina   que causaba inconformidad pero también incapacidad para la independencia de  los hijos de sus padres y cuyo tema central era la empalagosa relación del noviazgo colegial y la carrera de autos o motos. El verdadero Rock mexicano toma fuerza  ante la matanza de Tlatelolco ordenada por Gustavo Díaz Ordaz contra las marchas universitarias, principalmente del politécnico y la Universidad, en donde surgen con mayor fuerza Los Temerarios,Las Moskas, El tarro de mostaza, Apocalipsis, Javier Bátiz y Tito Bauche, aunque la radio y la televisión monopolizada quería neutralizarlos, con más grabaciones rockandroleras y la creación de bandas supuestamente callejeras como EL TRI, que alejadas de la televisión y el sistema, tenían como labor estratégica  transversal, apoyar a la televisión y al sistema presidencialista dictatorial bajo la plataforma  partidista única. Todo aquello que se contraponía a las determinaciones presidencialistas, incluyendo bandas extranjeras, resultaban más peligrosas que la bomba atómica, por lo que después de la segunda matanza estudiantil del 10 de junio de 1971 y de la llegada de Luis Echeverria a la Presidencia en donde ni unos juegos olímpicos ni un mundial de fútbol limpiaban la sangre de jóvenes, es que la industria de la televisión encabezada por Luis de Llano Macedo y la propia presidencia dictatorial, de manera  oculta, organizaron el inofensivo  Festival de Avándaro mismo que satanizaron con acontecimientos que nunca ocurrieron y que también fue patrocinado por la empresa Promotora Go, y con lo cual se prohibió de manera definitiva el Rock en México y se conservaron limitaciones de reunión en el código penal. Figuras  de la música juvenil mexicana como Los Shakes donde figuraban Nono Zaldívar, Mayita Campos y Pixie estaban con mayor fuerza, en la mira de la censura, y pronto fueron desaparecidos con la barredora de Televicentro y con El TRI como de las pocas bandas de supuesta protesta a la política del prigobierno. Con estas medidas se logró la castración  a la protesta  contestataria y a la expresión artística libre que fue intercambiada por el Festival OTI  y con la cárcel  y el exilio  para los líderes, empresarios y rockeros aunque cantaran en inglés. Posteriormente el rock en español renació con fuerza en argentina, al evitarse toda música en inglés por su enfrentamiento con Inglaterra por las Islas Malvinas, mientras que en España aparece un movimiento musical llamado “La Movida” que retoma al rock setentero, que poco a poco tomó nueva forma en un rock pop que contagió a México, con lo que regresó a nuestro país  el rock de temas menos ligeros aunque ya no de protesta social, lo que permitió el regreso de Miguel Ríos y la permisividad del apoyo televisivo, en donde Televicentro ya era Televisa y  el estuprador Luis de Llano seguía siendo Luis de Llano. Sin embargo bandas de rock mexicanas como Botellita de Jerez que apareció en 1983 pero retomó otros tintes en los noventas al igual que Ritmo Peligroso que tenía vida desde los setentas, El Haragán y Compañía fundado hasta 1989, La Lupita  fundada en 1991, entre otros, incluyendo a Molotov, el más  protestativo y que surgió hasta 1995  cuando al principio no era ese su propósito,  con lo que estas bandas  vinieron a dar nuevos aires a un rock  que tenía una barrera de contención con simuladores como Alejandra Guzmán hija de Enrique y el propio Ricky Luis que con temas ingeniosos y de buen ritmo, al final se mantenía comprometido bufonescamente  con Siempre en domingo y estrellas de los Ochentas, programas de la televisión con adiestramiento político. Ante un cambio de diferentes esquemas con la llegada del Presidente Andrés Manuel López Obrador quien  enterró el presidencialismo dictatorial, el rock tomó su propio cause con bandas y rockeros como Raymix, Los Estrambóticos, Chino y su Gala, La Tremenda Korte, Los JRS (La Sangre Nueva), Horacio Franco, Adrián Terrazas (Pelirroja), Iván Lachi, Sieck, Eddy y Los Grasosos, entre otros, quienes han roto el falso festival llamado por la democracia para este año organizar un  evento de despedida para el primer Presidente de la República de izquierda y de mayor aceptación en la historia de México, por lo que este 29 de septiembre, desde las 11 de la mañana hasta las 10 de la noche, y a horas de que  López Obrador deje la Presidencia, habrá la tocada denominada HASTA SIEMPRE PRESIDENTE  en el Monumento a la Revolución, ubicado en la Colonia Tabacalera de la alcaldía Cuauhtémoc de la Ciudad de México, lugar que el líder político muchas veces  llenó la construcción revolucionaria, y que ahora se espera la asistencia  estimada de 30 mil personas aunque no asistirá el mandatario con más de ochenta por ciento de aceptación. Este festival, que lleva como lema “¡La banda te va a extrañar!”, está organizado como un acto de agradecimiento al mandatario sin intervención gubernamental  y que tendrá réplicas en otros estados de la República con lo que a través de la música y la lucha libre, los organizadores buscan ofrecer un tributo popular al aún mandatario federal, destacando la conexión que ha mantenido con amplios sectores de la población durante su presidencia.



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