Resulta dudoso que en la lista de rating que presenta Televisa respecto al estado de sus telenovelas, nunca se haya registrado una de sus producciones sin alta audiencia o por debajo de otros programas de otra televisora. La única excepción se presentó en 1997 cuando una telenovela de Epigmenio Ibarra para TV AZTECA fue reconocida con empate de audiencia con otra de Televisa bajo la producción de Carla Estrada y teniendo como artista principal a Adela Noriega. Por tal situación existe la duda fundada de que las listas de audiencia estén manipuladas y únicamente sirvan como presunción publicitaria, por lo que resulta inexacto que lo que se proyecta en televisión sea realmente lo que demanda un televidente, quien ha encontrado una fuga de la televisión para refugiarse en los medios alternativos, sin embargo la monopolización televisiva y los momentos de programación adherida siguen funcionando como un retraso de cuarenta años para 25 millones de mexicanos que tienen acceso nulo al internet y sigue siendo su única fuente de entretenimiento el canal 2 como lo era en el pasado para quienes ya cuentan con señal de internet en su dispositivo como consecuencia de pago o prepago., por lo que las televisoras pueden obtener en su imposición de contenido, un alcance de a lo más, del cinco por ciento de los inhabilitados a la red, esos mexicanos que un poderoso concesionario de televisión, llamaba como "fregados"y a los cuales había que darles una programación "para fregados". Por lo que no coincidimos con la opinión del actor Luis Felipe Tovar que los televidentes mandan y son quienes al final de cuentas dan composición a la programación de un canal de televisión, que además tiene anunciantes y patrocinadores cautivos por ser la propia empresa televisora parte empresarial de los mismos que se anuncian. Esa es la razón que actores preparados como Luis Felipe Tovar que con pasión se entregó a las artes escénicas y es egresado de la Escuela de Bellas Artes, al final resulta un direccionado actoral de igual manera que cualquier actor impreparado e impuesto por una producción. De ahí que el llamado por muchos, gran maestro de actuación Luis Felipe Tovar termina siendo parte del elenco de productos televisivos como "Los Sánchez", "Pobre Rico Pobre", "Corazón en Condominio"o "Si Dios Mequita la Vida"bajo la producción de Juan Osorio, en un sitio donde todos son máximas estrellas bajo el aval de periodistas a modo o listas de audiencia, pero que a la hora de exponerse a una taquilla, los resultados son contrarios a lo que se presume ocurre en pantalla.