Un 11 de febrero como hoy, pero de 1972 nace para el panorama artístico la Diva de las telenovelas, Lucía Méndez, al ser considerada
como "El Rostro del Heraldo", que era
el reconocimiento más importante que se le podría brindar a un
lanzamiento juvenil, por medio del diario "El Heraldo de México"
que vivía el control mediático más estricto
del presidenciadictatorialismo,
caracterizado por la persecución a estudiantes, que un año antes al lanzamiento
de Lucía, se había concretado en otra
matanza como la de 1968, en el
llamado "halconazo" al transcurrir el sexenio de Luis Echeverria. La
monopolización de los medios y el cerco
informativo no permitía en ningún aspecto, ni en el artístico, dar un paso sin
la autorización y aprobación de un mandamás, ante la limitación de libertades y
de expresiones democráticas, en donde el
factor direccional de las masas tenía como instrumento principal a la televisión, que era el mundo en donde se
encaminaba Méndez, a la que se le
abrieron las puertas en ese mismo 1972,
para que se integrara a las producciones
de Ernesto Alonso, a los programas de Raúl Velasco y a las disqueras
poderosas como RCA que terminaría convirtiéndose en Ariola en donde como
cantante Lucía Méndez encontró su máximo punto
con temas de Honorio Herrero y Camilo Sesto, mientras que telenovelas
como Viviana en 1978 sin competencia televisiva de por medio, rompía récord de
televisiones sintonizando el canal 2. Y dos años más tarde, para nuestro punto
de vista, Lucía Méndez lograría como actriz
el magno proyecto de su carrera actoral, con la cinta "la
Ilegal" en un terreno más competitivo ante el moribundo pero
taquillero cine de ficheras y una nueva
propuesta en donde Méndez engrandeció el trabajo de Tomomi Kamata en secuencia fotográfica, en su mejor
versión para una carrera llena de éxitos, en la cual estamos convencidos que
aún sin los factores de tratamiento mediático que le tocó en su época, es que
Lucía habría logrado sobresalir con la vigencia que ahora lo hace, con otros
tiempos políticos y tecnológicos en
donde ya puede notarse la competencia ante la presencia de medios alternativos
y no tradicionales. Si hablamos de la historia de las telenovelas hispanoamericanas en donde Lucía se coronó como diva, y en donde en la actualidad sobresalen junto
con las realizaciones mexicanas, las telenovelas colombianas; no podemos olvidar nombres como Verónica Castro, Ana María Orozco,
Thalía, Adela Noriega, Sandra Reyes, Margarita Rosa de Francisco o Danna
García, cuyo éxito ha sido intercontinental, y en donde sería un pecado capital no agregar
en ese grupo actoral femenino a la guanajuatense con gloriosos 50 años de carrera artística.
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