No existe ni la persona ni el gobernante perfecto, y Claudia Sheinbaum está muy lejos de serlo, y más de llenar el espacio del Presidente López Obrador quien ha dado un paso casi perfecto en la transformación de la vida pública del país. La licenciada en física quien ha ocupado cargos de administración pública y de gobierno en los gobiernos de la CDMX y que en el 2018 ocupó la Jefatura de Gobierno, ahora ganó la selección de MORENA-Verde-PT, para ser la candidata a la presidencia del país y lograr ser la primer mujer que lo logra en la historia de México. A la cdmexense le seguirán fantasmas ante su inoperancia como titular del ejecutivo capitalino, como lo son la falta de acusación penal al saqueador Miguel Ángel Mancera como su antecesor en la silla de gobierno de la Ciudad capital, la acusación y cárcel injusta a la maestra Mónica García Villegas por el derrumbe de su propiedad en el terremoto 2017 que servía de su vivienda y de colegio, la falta de determinaciones respecto a monumentos y lugares públicos simbólicos de la capital del país, la pésima acción de movilidad para la Ciudad de México, en que resalta el accidente la incidencia fatal de la línea 12 del Metro y dejar a la CDMX sin ese importante transporte colectivo al cerrar de manera indefinida la línea 1 del metro y marcharse a candidatear sin ante terminar dicho compromiso que tiene a la CDMX shockeada en medio de marchas y transportes alternos ineficientes que pusieron en peligro de muerte a los pasajeros en tiempo de pandemia. También se tendrá que enfrentar a la guerra sucia encabezada por la mafia empresarial de X González,de los grupos antiprogresistas, de los ultraderechistas, y de sus contrapartes electorales como Xóchitl Gálvez quien recordará la corrupción del expareja de Sheinbaum, tratando de dejar en el olvido que la hermana de Xóchitl está presa por operar una banda de secuestradores, cuando nadie tiene que responder por hechos no propios. Sin embargo también debe valorarse el eficiente proceder de Sheinbaum en la jefatura de la Ciudad en la repartición de vacunas en plena pandemia, el evitar gatos innecesarios en su gobierno y no implantar impuestos, derechos o tramites en perjuicio de los ciudadanos para aumentar las arcas de gobierno, intervenciones oportunas en soluciones alternativas a conflictos como en el asunto penal en contra de YosStop, así como el no aumento del transporte público y mantener precios de gastos capitalinos que se contraponen a los caros gastos que asumen habitantes de los Estados vecinos como lo es el EDOMEX. habrá quienes vean a Claudia Sheinbaum como un elemento funcional de gobierno y otros como una candidata no idónea para ocupar la presidencia, pero está claro, que la mayoría optará por ella como Presidente del país, ya sea como una pieza necesaria para continuar con el progresismo, la transformación y la recuperación del país ante la corrupción, el saqueo y el neoliberalismo y habrá otros que la verán como un ml necesario, antes de votar por el disimulo en una boleta que seguramente ocupará Marcelo Ebrard por Movimiento Ciudadano o Xóchitl Gálvez cuya deshonestidad, ultraje y actuar de ladrona, está plenamente comprobada, y quien ahora no le importa seguir siendo Senadora de la República de manera plurinominal, siendo al mismo tiempo, candidata de la derecha. Existe la determinación firme y posible triunfo electoral para que Claudia Sheinbaum Pardo en poco menos de un año pueda portar la banda presidencial para el caso de que se respete nuestro débil sistema democrático, que bajo esas condiciones, no me queda la menor duda que Sheinbaum resulta la mejor opción., de la misma manera que también lo advierte el actual Presidente.