Ya hasta se ha censurado hablar de una negra cuando ese calificativo debería ser motivo de orgullo y también de belleza, y no debería para algunos, tontamente considerarlo como un insulto o una descalificación. Tal es el caso de Antonia Salazar, quien defiende ser La negra de Oro. En una conversación con la exacadémica, Toñita ante la confianza que siempre le tiene a la cámara de somoselespectador, nos confesó que es sincera, pero ahora mide de manera estratégica sus palabras para no tropezar en una sociedad que parece estar formulada para la mentira y las medias verdades.