“Los litros de cerveza por las esquinas,las canciones que
cantan todas las niñas,tómate otro zumito de piña y échale un poquito de ron”,
y se tendría que agregar, y escucha la voz romántica de Flor Marina y comienza a volar con su belleza. El bar en donde la linda Marina Valencia se "echo un palomazo" , lo convirtió en la guarida romántica de una noche extraordinaria que parecía sería una noche casual. La bella mujer cuenta con una sonrisa, unos ojos mágicos y una clase que pocos interpretes tienen para enriquecer una bohemia, por lo que su estilo elegante, parecía ser un homenaje anticipado