Todo parece que nadie detendrá a Alana Lliteras quien se perfila para la final y quizá ganar en La casa de los famosos USA que es el exbig Brother que ahora lo realiza Telemundo. En el caso del programa del encierro, realizado en México por Televisa, el ganador fue Guevara Venegas quien como transexual se nombra como Wendy, y aunque el programa supuestamente se gana por medio de votos del público, la realidad es que la producción de estos reality show, ya tienen pactado al ganador y hasta las etapas en que los habitantes del juego, tendrán que ir saliendo de la casa, por lo que dar a Wendy como ganador, fue una estrategia de supuesta inclusión pero que también guarda un plan de polisexualismo indistintivo. Ahora Telemundo puede reivindicar no la santificación pero sí, la clarificación de que una joven bonita, heterosexual, inexperta y en el límite de lo ingenua con lo tonta, puede ser ganadora sobre muchos otros, incluyendo aquellos que se nombran astutos por tener una experiencia de vida robusta, aunque esté basada en el uso de las drogas, el alcohol y la sobrevivencia por medio del comercio carnal, y que son capaces de invadir los canales de televisión que se dicen estar reservados para la gran familia mexicana y en sus horarios que no son exclusivos de adultos.
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