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La hermosa cantante y actriz, Ivonne Montero aceptó entrar a
un reality show de cautiverio las 24
horas por más de dos meses, en lo que resulta una agotada fórmula de Big
Brother, para el televidente morbosamente ocioso que espera ver caricias estimuladoras
o un acto de aseo íntimo de quienes por celebridades, han dominado siempre el
glamour. Telemundo puso una página
disponible para que el público fuera espía de esta fórmula televisiva que llegó
a México junto con el año dos mil, utilizando para el programa a famosos más que a estrellas, y que
han resultado manjar del pseudo periodismo de espectáculos. En lo que parece un
frasco de insectos atrapados; la única estrella del reality y que se pasea entre las
recamaras y baños dela supuesta “casa de los famosos” es Ivonne Montero, cuya
sensualidad ha logrado que el televidente parezca jefe de seguridad en su labor
de circuito cerrado, abandonando otras actividades y programaciones, ya que aman ver en pijama, o con la boca sosteniendo un cepillo dental a Montero, por lo que parece han
pasado la prueba de lo que sería el convivio conyugal con la cdmxense. Desde hace
dos años, Ivonne ha sensualizado con sus mechones de canas cadavez más acumulados, y que en vez de ocultarlos, han sido ya una
tendencia gerontofiliomaniaca. Para quienes han seguido este programa, aseguran que Ivonne Montero debe y será la ganadora d ela resistencia domiciliaria.
