lunes, 3 de abril de 2017

GUERRA DE CONTENIDOS

















LENTE OCULTO



Por más que justifiquen tipos de horarios y de televidentes; lo cierto es que la televisión mexicana ha bajado notoriamente su calidad en sus programaciones debido a la política  estructurada en el país, en donde lo menos que interesa y conviene es difundir cultura y educación, situación que han aprovechado personajes de bajo nivel intelectual para sobresalir en la pantalla casera que ha sido capaz de atropellar  con sus contenidos, los valores familiares que al  estar debilitados  se destrozan ante  los malos ejemplos y lenguaje que aparece en pantalla. Aunque la televisión  no es una fuente educativa, sí es un bien público; por lo que,  en un país atrasado en su sistema educativo como el nuestro, es donde se debe  imperar una programación  televisiva que  asuma  no empeorar la situación intelectual de un televidente vulnerable.