lunes, 7 de septiembre de 2015

LETICIA PERDIGON CON LUCHA








































Con 45 años de carrera artística y con la misma belleza en plenitud de siempre; la actriz Leticia Perdigón recibió gallo de oro del premio Trilogía, en una noche en donde también se le rindió  homenaje a la enorme LUCHA VILLA en presencia de sus familiares y de la talentosa DAMIARA VILLA. Perdigón participó junto con la giagante de la música mexicana en el papel de su escultural hija, en las inolvidables cintas de La Lagunilla mi Barrio.


   


ENRIQUE PEÑA NIETO EN UN MENSAJE A LA NACION POR SU TERCER INFORME DE GOBIERNO 

































El Presidente Enrique  Peña Nieto  hizo lectura de un mensaje con motivo de su Tercer Informe de gobierno y la mitad de su sexenio presidencial; por lo que señaló: “El último año, ha sido difícil para México.Nuestro país se vio profundamente lastimado por una serie de casos y sucesos lamentables.Los hechos ocurridos en Iguala o la fuga de un penal de alta seguridad, nos recuerdan situaciones de violencia, crimen o debilidad del Estado de Derecho.Señalamientos de conflictos de interés ─que incluso involucraron al Titular del Ejecutivo─; así como denuncias de corrupción en los órdenes municipal, estatal y federal ─y en algunos casos en el ámbito privado─, han generado molestia e indignación en la sociedad mexicana.Estas situaciones, son muy distintas entre sí, pero todas lastiman el ánimo de los mexicanos y la confianza ciudadana en las instituciones.A este ambiente, se suma ahora la preocupación de las familias, por el futuro de la economía.Hoy los mexicanos escuchan en los medios de comunicación, que bajan los precios del petróleo y sube el dólar. Y si bien esta situación responde a fenómenos del exterior, temen que su economía pueda verse afectada.Es decir, hoy México enfrenta una situación de desconfianza en lo interno, y de incertidumbre en lo externo, por la economía internacional.¿Qué vamos a hacer como país ante los retos y dificultades que enfrenta México? Nuestra respuesta, es contundente: vamos a enfrentar los desafíos, con claridad de rumbo y absoluta determinación”.

También el Presidente de los Estados Unidos Mexicanos sentenció: Hoy el mundo aún no termina de superar los efectos económicos y sociales, derivados de las graves crisis financieras de 2008; sin duda unas de las peores en décadas.La desigualdad social ha aumentado en la mayoría de las naciones; el crecimiento económico no ha recuperado su dinamismo previo; y tampoco han bajado las tasas de desempleo a los niveles anteriores a la crisis.Esta situación se vuelve todavía más compleja, por los acelerados avances tecnológicos, que están alterando dramáticamente la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos.Hay frustración y pesimismo; desencanto y malestar social en Europa, en Asia y en América; en prácticamente todos los continentes.Los medios digitales y las redes sociales reflejan estos sentimientos de preocupación y enojo; manifiestan que las cosas no funcionan y dan voz a una exigencia generalizada de cambio ─de cambio inmediato─.

En todas las naciones surgen dudas y se enfrentan dilemas sobre cuál es el mejor camino a seguir.En este ambiente de incertidumbre, el riesgo es que en su afán de encontrar salidas rápidas, las sociedades opten por salidas falsas.Me refiero al riesgo de creer que la intolerancia, la demagogia o el populismo, son verdaderas soluciones.Esto no es nuevo. Es una amenaza recurrente que ha acechado a las naciones en el pasado.Hay ejemplos en la historia, en donde los sentimientos de inconformidad tras crisis económicas globales, facilitaron el surgimiento de doctrinas contrarias a la tolerancia y a los Derechos Humanos.En esos episodios, la insatisfacción social fue tal, que nubló la mente, desplazó a la razón y a la propia ciudadanía; permitiendo el ascenso de gobiernos que ofrecían supuestas soluciones mágicas.Sin embargo, esos mismos gobiernos, lejos de llevar a sus sociedades hacia mejores condiciones de vida, alentaron el encono y la discordia; destruyeron sus instituciones y socavaron los derechos y libertades de su población.De manera abierta o velada, la demagogia y el populismo erosionan la confianza de la población; alientan su insatisfacción; y fomentan el odio en contra de instituciones o comunidades enteras.Donde se impone la intolerancia, la demagogia o el populismo, las naciones, lejos de alcanzar el cambio anhelado, encuentran división o retroceso.Los cambios positivos y duraderos de toda sociedad; se logran por la vía de la responsabilidad, de la institucionalidad, de la estabilidad económica, del respeto a los demás y de la voluntad de construir sobre lo que ya se ha avanzado.Esa es mi responsabilidad, como Presidente de la República.Mi responsabilidad como Presidente de la República es avanzar sin dividir; reformar sin excluir; transformar sin destruir.Esa es mi responsabilidad desde 2012, cuando México votó por un proyecto de cambio con rumbo; un cambio de fondo, a través de las instituciones.Eso es lo que hemos hecho como país, en estos 3 años: enfrentar rezagos ancestrales, vencer resistencias, superar inercias y transformar instituciones.Nos comprometimos a hacer reformas estructurales y hoy ya se están implementando.Nos comprometimos a modernizar las políticas públicas y así lo hemos hecho.Nos comprometimos a desarrollar infraestructura a lo largo del país, y la estamos construyendo”.
Y concluyó diciendo: “ Hoy, puedo decir ─de frente a la Nación─ que estamos cumpliendo con el proyecto de cambio con rumbo, al que me comprometí.Sin duda, enfrentamos viejos y nuevos problemas. Para superarlos, lejos de retroceder, debemos seguir adelante, hay que continuar por la ruta que nos hemos trazado.Es un principio elemental de responsabilidad democrática, perseverar en el proyecto de nación por el que votaron los mexicanos.Vamos a seguir por esa ruta –que es difícil y compleja–, pero que es la única que nos permitirá brindar desarrollo a nuestra gente; a nuestro México, que tanto queremos.Hoy tenemos cimientos más sólidos para enfrentar la coyuntura internacional, y sobre todo, para edificar una nación más próspera e incluyente.Si hace 3 años era importante que el país NO diera un salto al vacío, hoy es esencial que México NO claudique en su proceso transformador.A partir de lo avanzado en esta primera mitad, y de las lecciones aprendidas, habremos de profundizar y consolidar los cambios, y que éstos, se traduzcan en mayor calidad de vida para los mexicanos.Es un hecho que la economía mundial habrá de mejorar, y cuando llegue ese momento, México será de las naciones con mejores condiciones para crecer aceleradamente.México se perfila ya como una de las 10 economías más grandes del mundo. Lo que esto nos dice a los mexicanos de hoy, es que nuestro país tiene todo para ser una potencia en los siguientes años.México está destinado a ser una de las naciones más prósperas, de mayor bienestar para su gente y motivo de inspiración para el mundo.Como Presidente de la República, estoy decidido a poner mi mayor pasión, dedicación y empeño, para que así sea.Con esta convicción, entramos a esta segunda mitad, con muchas ganas y más fuerza.
 

AQUI NO TERMINA TODO...

PARA VER MAS CONTENIDO; DAR CLICK EN LAS ENTRADAS ANTIGUAS QUE APARECEN AL PIE DE ESTA NOTA.